En este post te daré información sobre en qué consiste el trastorno por atracón. 

Este trastorno está asociado a un problema en la relación con la comida. Concretamente, se caracteriza por tener episodios de ingesta compulsiva, donde se llegan a ingerir grandes cantidades de comida en poco tiempo.

La gravedad del trastorno tiene en cuenta el número de ellos a lo largo de la semana y el tiempo de evolución entre otras.

Las personas que padecen trastorno por atracón suelen sentirse avergonzadas y por ello lo sufren en silencio. Los atracones por ello, suelen tener lugar a escondidas de la familia, pareja y amig@s. Debido a estos sentimientos de vergüenza y soledad, quién lo padece pide ayuda profesional cuando se lleva bastante tiempo padeciéndolo.

Este trastorno, produce además de vergüenza, mucha sensación de indefensión, ya que te puedes sentirte incapaz de controlarlo. Much@s pacientes, antes de pedir ayuda han intentado ponerle fin por todos los medios: a través de dietas, ejercicio físico intenso, dejar de comprar alimentos desencadenantes del atracón, comprar solo por internet para resistir la tentación al pasar por una tienda, etc. 

Todas ellas son válidas ya que pueden mitigar el número de atracones, pero es importante también valorar y trabajar la parte psicológica que hace que se produzca el atracón.

Para ello es importante reducir la sensación de estar fuera de control y la impulsividad. Muchas personas manifiestan que cuando se produce el atracón se sienten fuera de ellas mismas, que no se reconocen y que no pueden pararlo aún siendo conscientes de que lo están haciendo. En consulta suele expresarse »Es como si una parte de mi estuviese siendo secuestrada por otra que toma el control».

También pueden darse momentos de atracón en los que la persona no se está dando cuenta de que está ingiriendo de forma compulsiva, y darse cuenta pasado un rato o simplemente olvidarlo.

Estas experiencias de sentirse sin autocontrol pueden provocar autoinculpaciones relacionadas con una falta de fuerza de voluntad, lo que repercute negativamente en la autoestima, acentuando la sensación de indefensión y sentimientos de desesperanza para poder vencer el impulso.

La cantidad de comida ingerida, su composición, el momento del día, el lugar, la velocidad, su estado (a veces el impulso es tan grande que si no hay comida disponible en buen estado, puede recurrirse a la basura o a la comida congelada). Aumentan las sensaciones de vergüenza dificultando el pedir ayuda.

Todo ello aumenta la sensación de indefensión hacia el control de los atracones pudiendo sentir que no se puede hacer nada para pararlos. Creando la falsa idea de que no se tiene solución, de que es algo vergonzoso, que no le ocurre a nadie más, que se está en un proceso de perdida de control global de una misma, etc.

¿Qué experiencias psicológicas pueden estar detrás del trastorno por atracón?

Debajo de los atracones pueden encontrarse diferentes experiencias y procesos psicológicos que provocan y perpetúan el problemas. Algunos de ellos pueden ser:

-Situaciones de estrés pasadas o presentes.

–Duelo: perdida de seres queridos, ruptura amorosa, perdida de empleo, cambio forzoso de ciudad, etc.

-Trastornos de ansiedad.

-Sentimientos de soledad, tristeza, angustia, baja autoestima.

-Hábitos de alimentación no saludables desde la infancia.

-Pautas alimentarios que aumentan la frecuencia de éstos.

-Consumo de drogas.

-Experiencias traumáticas.

Todas ellas pueden promover la aparición de los atracones.

Si te has sentido identificad@ te recomiendo que consultes sin compromiso y con total confidencialidad. Te asesoraré sobre el tratamiento para tu caso concreto.